Caminetto 08.R.28

La historia de Caminetto comienza en 1959 cuando Giuseppe Ascorti, conocido como "Peppino", fue contratado por Carlo Scotti para trabajar en Castello, una fábrica de pipas en Cantu. Ascorti se destacó rápidamente y se convirtió en un pipemaker notable. Sin embargo, tenía la ambición de trabajar por su cuenta. Con el tiempo, y gracias al apoyo económico de su esposa Paola, Ascorti logró reunir las herramientas necesarias y en 1968 dejó Castello para iniciar su propio taller junto a su vecino y talentoso pipemaker Luigi Radice.

Gianni Davoli, un comerciante de tabaco en Milán, se convirtió en su distribuidor principal, promoviendo las pipas Caminetto en Estados Unidos con gran éxito. La marca se asoció con la imagen de una chimenea, "camino" en italiano, y los tres hombres fueron conocidos como "I tre Camini" - los tres chimeneas. La marca se destacó por su alta calidad y precios competitivos en comparación con Castello.

En la década de 1970, Caminetto prosperó, pero las diferencias entre Ascorti, Radice y Davoli comenzaron a surgir. Radice estaba insatisfecho con la producción en masa que limitaba su creatividad y temía que la calidad disminuyera. Las tensiones aumentaron cuando Davoli, que controlaba la mayoría del capital de la empresa, se negó a contratar al hijo de Ascorti, Roberto.

En 1979, Radice dejó la empresa y poco después Ascorti también se fue, llevándose a su equipo y fundando una nueva empresa bajo su propio nombre, Ascorti. Mientras tanto, Davoli se quedó con la marca Caminetto, pero sin pipemakers, y poco después, el taller original de Caminetto se incendió y quedó en ruinas.